El servicio FDM es una técnica que permite crear modelos en 3 dimensiones usando material plástico fundido. Para empezar, se introduce en la máquina un carrete del material plástico que se quiere usar. Éste se ira calentando y fundiendo para poder ser depositado, a través de una boquilla, como un hilo de plástico líquido sobre una plataforma de trabajo.  

Las máquinas trabajan con el más avanzado software para leer los modelos generados en 3D (por ejemplo modelo CAD), y dividir el modelo en secciones laminares. Sobre la plataforma de trabajo, la boquilla irá aplicando hilos de plástico fundido siguiendo el trazados de las secciones leídas en el modelo 3D. Una vez que una sección está completa, la plataforma de trabajo bajará unos milímetros (correspondientes al espesor de cada sección), y la boquilla comenzará a depositar el material fundido para crear la siguiente sección.  Sobre cada capa escaneada y solidificada se aplicará una nueva capa. Este proceso se repetirá hasta que la pieza esté terminada. 

Hoy en día encontramos máquinas FDM que trabajan con dos boquillas. Una de ellas deposita el material plástico elegido para crear la pieza 3D, mientras la otra deposita un material auxiliar para crear estructuras temporales de apoyo durante el proceso de construcción de la pieza. Una vez la pieza está terminada, este material auxiliar puede ser fácilmente retirado, bien a mano, o bien lavando la pieza en líquido disolvente.